El protocolo, basado en altos estándares de derechos humanos

▲ Tras el zafarrancho provocado por policías federales rebeldes, personal del ERUM atendió a unas 60 personas heridas.Foto Alfredo Domínguez

Bertha Teresa Ramírez

 

Periódico La Jornada
Miércoles 13 de noviembre de 2019, p. 34

El protocolo de actuación contra el bloqueo de vialidades –que considera el uso de la fuerza pública como último recurso para liberar las zonas afectadas cuando se considere que no hay condiciones para continuar un diálogo con los manifestantes– se fundamenta en altos estándares de derechos humanos e incluye un procedimiento para que si las personas que realizan la protesta social lo requieren, la Comision de Derechos Humanos los acompañe, señaló la titular de este organismo, Nashieli Ramírez Hernández.

El principio del nuevo mecanismo no es el uso de la fuerza. Su principio es la mediación y la conciliación, y en la medida que se llegue a lo último y no haya solución tanto de atención a las demandas como al manejo, lo que va a haber es la presencia, pero ya en casos excepcionales de seguridad ciudadana, siguiendo el protocolo del uso moderado de la fuerza, no con policías que vayan a estar armados. No estamos hablando, de ninguna manera, de procesos de represión”, indicó.

La ombudsman agregó que sin que hasta el momento haya llegado a queja, sí hay una demanda clara y la comisión tiene muy claro algo: que en este proceso hay una contraposición de derechos.

Dijo que el organismo a su cargo tiene la obligación de apoyar a las personas que así lo requieran para ejercer su derecho a la libertad de protesta, pero también sabemos que este tipo de cosas vulnera derechos de otros como el de movilidad, y en esa lógica acompañamos la formulación de este mecanismo, señaló al ser entrevistada tras participar en el segundo día de trabajos del simposio Retos y perspectivas del mundo laboral, organizado por la Secretaría del Trabajo y Fomento al Empleo de la Ciudad de México.

El mecanismo permitirá que en caso de bloqueos de vialidades primarias, éstas se puedan liberar intermitentemente para dar paso a ambulancias y autobuses o bien liberar el paso cada dos altos de semáforo. “Hay una cosa que se llama intermitencia. Está bien, es su manera de protestar, pero lo que vamos a hacer es un alto. Estás aquí, dos altos lo liberas, no puedes tener todas las vías (cerradas) porque hay cosas que hay que dejar pasar, como ambulancias, autobuses…”

Además, ante un bloqueo, las autoridades tendrán que tomar previsiones para dar alternativas viales, y evitar así que inesperadamente la gente se quede inmovilizada al no poder transitar por no haber estas alternativas.