Ébola, las teorías de la conspiración
Enerfin, CetesDirecto
Italia sale de la recesión
Enrique Galván Ochoa
S
in que todavía pueda decirse que es una epidemia, los casos de ébola que han aparecido en Estados Unidos y España han desatado teorías de que se trata de una conspiración. La que más se menciona en las redes sociales es que se trata de una maquinación de los grandes laboratorios internacionales. Según esto, cuando lo consideren oportuno, lanzarían al mercado una vacuna para contener la enfermedad para la que hoy día aparentemente no hay cura. Las teorías conspiracionistas se han abierto paso en las páginas de los diarios. En septiembre, elDaily Observer, un periódico de Liberia, publicó un artículo alegando que el virus no era lo que parecía –un desastre médico–, sino un arma biológica diseñada por el ejército estadunidense para despoblar al planeta. Mientras que muchas de estas teorías han estado circulando en la marginalidad de Internet, algunos casos persistieron y se colaron a los principales sitios. Hace algunos días el artista de hip-hop Chris Brown dijo a sus 13 millones de seguidores en Twitter: “No sé… pero creo que esta epidemia de ébola es una forma de control poblacional”. Las teorías de la conspiración siempre se han movido a la par de las noticias, ofreciendo explicaciones a la sombra de actos angustiantes o sorprendentes. Si bien son frecuentemente descartadas por ser una mezcla destructiva de falsedad y sinsentido, a menudo reflejan los miedos de la sociedad. Cuando la fiebre porcina atacó a México allá por 2009, la industria de la porcicultura se movió para que se le cambiara de nombre. Así fue que se adoptó el nombre de H1N1. Y no puede olvidarse que la venta de medicinas, cubrebocas y desinfectantes para las manos constituyó un gran negocio. Todavía hoy en hoteles, restaurantes y otros sitios públicos no faltan los desinfectantes al alcance del público.
Enerfin, CetesDirecto
Nacional Financiera lanzó Enerfin, un instrumento ideado para obtener beneficios de empresas relacionadas con la industria de la energía. De acuerdo con Luis Alberto Rico, director de la Operadora de Fondos de Nacional Financiera,
antes no era posible invertir en CFE o Pemex, o empresas de la industria. Con este vehículo se recoge el dinero de los ahorradores, se voltea e invierte en instrumentos de deuda de las empresas. Se trata de un ahorro que participa en un portafolio de renta variable, similar al de las Afores, que irá creciendo a medida que más empresas lleguen a México para invertir en la industria energética. Explica que es de fácil acceso, pues se subió a la plataforma de CetesDirecto.
Cualquier persona que tenga una cuenta de CetesDirecto podrá ahorrar en Enerfin a partir de 100 pesos, y señala que el rendimiento esperado será de medio punto porcentual adicional al rendimiento de los Cetes a 28 días.
Hoy puedes invertir, pero sólo sobre el portafolio existente, conforme se vaya especializando iremos adquiriendo un universo mayor de papeles de deuda de las empresas, que ya funciona y no lo hace nada mal. Este instrumento sólo está disponible para ciudadanas y ciudadanos mexicanos.
La fórmula
Italia salió de la recesión gracias a los cambios en el método para calcular el producto interno bruto (PIB) implantado por la Unión Europea, que ahora incluye actividades ilegales como la prostitución y las drogas. Al sumarse los ingresos por sexoservicios, narcóticos y mercado negro de tabaco y alcohol, la tercera economía de la eurozona logró una revisión al alza de sus datos del primer trimestre, en vez de un retroceso. Esperan que los siguientes trimestres seguirán mostrando crecimiento. ¿Es una buena idea para México? El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) ya introdujo el cálculo de la siembra de la mariguana. Una revisión más amplia tal vez nos llevaría a descubrir que no es el petróleo el que mueve la economía, tampoco los envíos de dólares de nuestros paisanos a sus familias ni la exportación de vehículos, sino otras actividades non sanctas.
@Vox Populi
Asunto: problemas de Banamex
El 16 de octubre acudí al cajero que se encuentra en San Pedro Mártir y solicité la cantidad de 4 mil pesos. Me entregó 3 mil 500, pero la papeleta se imprimió por 4 mil. Acudí al personal de la sucursal, pero me dijeron que son ajenos a lo que sucede en los cajeros. Me mandaron al teléfono negro que se encuentra en uno de los escritorios, al cual tuve acceso después de esperar media hora porque otra quejosa lo estaba usando. Se me indicó que después de 24 horas volviera a consultar mi saldo. Si la cantidad reclamada no aparecía, que volviera a llamar. Así lo hice y lo único que pasó es que me dijeron que en 24 horas hábiles se comunicarían conmigo. Yo sé que son argucias para no responder por la irregularidad del cajero, pero no quiero dejar de reclamar y recuperar mi dinero.
M. Skely
R: Javier Arrigunaga Gómez del Campo dejó hecho una desgracia al banco. El nuevo director general, Ernesto Torres Cantú, tiene que darle una vuelta completa. Sus utilidades importantes no vienen de empresas como Oceanografía, sino de millones de clientes. Merecen un mejor trato.
Twitter
La difícil decisión al ir al cine y no saber si comprarte un combo cuates o pagar la renta de tu depa.
Nacer en el IMSS forja el carácter.
Mi iPhone tiene menos memoria que un joven priísta.
Twitter: @galvanochoa
FaceBook: galvanochoa
No hay comentarios:
Publicar un comentario