Un fantasma recorre el mundo… El fantasma de las multitudes que inesperadamente toman las calles, se agrupan en plazas y desde ahí, con la pluralidad de sus voces aliadas y convertidas en un solo grito en el que se funden la alegría y la exasperación, exigen democracia, respeto a los derechos humanos, cárcel para los corruptos, freno a la especulación inmobiliaria, igualdad de oportunidades, educación gratuita y de calidad, protección a la naturaleza, libertad para vivir y manifestarse sin ser considerados delincuentes… El motivo de los gritos, por diversos que parezcan, tal vez pueda sintetizarse en una sola palabra: Respeto.
El sistema neoliberal global, no ha dejado de abusar de los recursos que tiene a la mano, y tal parece que los tiene todos. No ha dejado de esquilmar a mujeres y hombres en ninguno de los rincones donde ha asentado sus reales, y tal parece que los ha asentado en todas partes. No ha dejado de coartar las libertades de la gente ni ha cejado en su intento de apoderarse de sus voluntades, y tal parece que en este punto ha fracasado, pues no todas las mujeres ni todos los hombres han aceptado que se les conculque su libertad y millones no han permitido que su voluntad de vida se derrumbe.
El fantasma que recorre el mundo se manifiesta antifutbolero, aunque usted no lo crea, en el futbolerísimo Brasil; en la remota Turquía, que no por distante, deja de enviarnos información casi al instante a través de la red y el uso libertario que es posible darle; se manifiesta el fantasma lo mismo en el Cairo, que en Atenas; también se deja sentir en Madrid, Barcelona y otras ciudades españolas; en París lo mismo que en Santiago de Chile e, incluso, en Nueva York, exactamente en Wall Street, la capital del imperio neoliberalista.
Acá, en México, el fantasma no ha dejado de mostrarse enérgico: en 2006 tras el fraude y el ocho de mayo de 2011, cuando gritó basta de sangre. También se le vio juvenil y vigoroso las semanas previas a las elecciones del 2012 y, últimamente, lo mismo en las marchas del magisterio disidente, que en la de los ciudadanos que exigieron justicia para los bebés calcinados en la guardería abc…
Seguramente se le volverá a ver pronto acá, como actualmente se le ve en otros lares, porque ese fantasma representa la voluntad invicta de quienes, a lo largo y ancho de la aldea global, están (estamos) dispuestos a hacernos respetar.
@Vegdelanoche
Nota editorial leída en #LosAtractivosDeLaNoche, programa de radiomalo.org
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