¿Estamos obligados a hacer más rico al señor Slim?
El país donde las vacas no engordan
Receta para ser pobre
Enrique Galván Ochoa
L
a Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos comprende 136 artículos, más las reformas, o parches, que le han ido añadiendo. Ninguno contiene la obligación del Estado mexicano para seguir haciendo más rico y poderoso al señor Carlos Slim; tampoco al joven Emilio Azcárraga o algún otro de nuestros billonarios. Al contrario, aun con la liposucción de que ha sido víctima la Carta Magna para quitarle lo que tenía de contenido social, todavía conserva su contenido antimonopólico. La semana anterior, uno de los herederos del dueño de Grupo Carso, Carlos Slim Domit, declaró que no están de acuerdo con esperar 24 meses a que el gobierno les otorgue una concesión para operar una televisora. Tal condición derivaría de la nueva legislación en proceso. Durante esos dos años tendrían que cumplir una serie de obligaciones bajo la inspección del Instituto Federal de Telecomunicaciones. El grupo Slim exige ya, ahora mismo, su televisora. Quiere el poder político que da la televisión a los concesionarios. Ahí es donde cabe la pregunta: ¿dónde está la obligación constitucional, legal, ética o económica de hacer más poderoso al señor Slim? ¿Qué otros grupos empresariales no tienen derecho a quedarse con una de las dos nuevas cadenas? Las reformas del presidente Peña Nieto tienen el propósito –al menos en el discurso– de limitar a los poderes fácticos. En realidad hasta hoy sólo ha amenazado con darles un par de nalgadas a Televisa y a Telmex. Los ciudadanos –aunque descreídos– esperaban más. Todavía tiene Peña Nieto a su alcance la tarea de desarticular los monopolios. Quizá una acción de ese tamaño lograría paliar un poco lo que ha hecho con el petróleo. Paliar un poco, no borrar.
Otro año sin vacas gordas
Una de las disculpas, pretextos o coartadas de los economistas para justificar la falta de crecimiento de la economía mexicana es culpar a Estados Unidos. Allá no crece, aquí tampoco, porque dependemos de sus importaciones. Sin embargo –como lo muestra la gráfica anexa–, la economía estadunidense creció en 2013 y la mexicana estuvo en desaceleración. Para el año en curso las cosas no pintan mejor. La Secretaría de Hacienda saldrá corta en su cálculo de un crecimiento del producto interno bruto de 3.9% –que tampoco es una maravilla. Ya los analistas de Banamex, Banorte, FMI y otros han ajustado desfavorablemente el cálculo. Así que bien podría formularse esta regla: cuando la economía de Estados Unidos no crece, en México no crece; y cuando crece, tampoco.
Pollo Loco
El Pollo Loco es una cadena de restaurantes popular en el norte del país. Tiene origen modesto: vendía pollo asado a la orilla de la carretera. Prepara su oferta pública inicial (OPI) en la bolsa neoyorquina, dice The Wall Street Journal.
e@Vox Populi
Fiebre del oro; primer saqueo
En 1845 ocurrió lo que se conoce como la fiebre del oro, en terrenos de lo que ahora es el estado de California, en Estados Unidos; pero da la casualidad que en esos años esas tierras eran propiedad de México. Ese fue uno de los primeros saqueos, que se repiten ahora en todo el territorio mexicano gracias a las concesiones (yo creo quemochada de por medio), y que se va a dar de nuevo con el petróleo y el gas. Nos hace falta Putin aquí; vamos a pedirle que se nacionalice... Hacemos un referendo y seguramente el pueblo lo aceptaría con los brazos abiertos. Desde luego los traidores de los partidos políticos votarían en contra, pero no son muchos.
Jorge Granados Samaniego/Distrito Federal
R: Estimado señor Granados: putines no creo que nos hagan falta. Más bien necesitamos partidos de oposición. Se alinearon con el PRI. Hay muchas esperanzas en Morena.
Twitter
Receta para ser pobre: compra lo que no necesitas, con dinero que no tienes, para impresionar a quien no le importa. ¡Infalible!
–¿A qué te dedicas?
–Soy corredor de bolsa.
–¿Vendes acciones?
–No, soy cerillo de Walmart.
Estoy tan enamorado que voy a poner una tiendita de quesos y la voy a llamar «Quesería de Mí sin Ti».
Twitter: @galvanochoa
FaceBook: galvanochoa
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