Admite AMLO aumento a la gasolina Magna, pero dice que habrá ajuste Alonso Urrutia

En espera de cumplir compromiso de campaña

 

Periódico La Jornada
Miércoles 27 de febrero de 2019, p. 7

A partir del inicio de esta administración los precios de la gasolina Magna han aumentado, aunque la Premium se ha reducido, reconoció el presidente Andrés Manuel López Obrador. Sin embargo, adelantó que en apego al compromiso público de que los energéticos –gasolina, gas, luz– no se incrementen en términos reales, si se está dando ese aumento estamos esperando el momento para hacer un ajuste y para cumplir el compromiso.

En otro orden, señaló que ante las irregularidades detectadas en algunas obras inconclusas del pasado gobierno que han disparado el costo de éstas, vamos a presentar denuncias para no ser cómplices. Cuestionó la programación de obras, porque se convirtió en mucho tiradero de obras inconclusas y ejemplificó: el tren Toluca-Ciudad de México se programó en 20 mil millones de pesos y costará 65 mil millones.

Declinó opinar sobre la incorporación del ex secretario de Hacienda José Antonio Meade al consejo de administración del banco HSBC: Ya hablé de eso, ya no quiero. Ya no quiero que llueva sobre mojado, dijo en alusión a sus reiterados cuestionamientos a ex funcionarios por conflictos de intereses. Refirió que hay una iniciativa para regular en la materia, para que esto no suceda y exista una veda de 10 años.

López Obrador admitió que el precio de la gasolina Magna se incrementó. Frente a esta situación, dijo que cumplirá su ofrecimiento de que los energéticos no van a aumentar en términos reales.

¿Qué significa? La gasolina no va a aumentar arriba de la inflación, nunca, ni el diésel ni el gas ni la luz. En mis giras me muestran recibos de luz que vienen por arriba de lo normal. Ya di instrucciones para que se revisen, porque no quiero que dentro del gobierno los que tienen que ver con esto nos estén jugando chueco para provocar inconformidad con la gente.

Informó que el encuentro que sostuvo la víspera con empresarios –Emilio Azcárraga, Alberto Baillères y Germán Larrea, entre otros– fue para intercambiar puntos de vista con el propósito de alentar inversiones y generar confianza, porque la inversión pública por sí sola no garantiza el crecimiento del país al 4 por ciento.

El combate a la corrupción implicaría en sí mismo un incremento en la inversión pública, pues México se mantiene como uno de los países con menor inversión gubernamental y es que “cuando hay corrupción se impide el crecimiento.

“Si se invierten en el papel 600 mil millones de pesos, en realidad son efectivos, si acaso, 300 mil millones, porque esa inversión pública se convierte en corrupción en su mayor parte. Se hacen obras que no se terminan. Ahora esos 600 mil millones, en efecto, van a ser inversión pública y no se van a ir por el caño de la corrupción.

López Obrador deploró que se enfrentan a una situación de muchas irregularidades, una herencia de obras inconclusas, de inversiones sin beneficios. Informó que el caso del tren Toluca-Ciudad de México no es el único en el que los retrasos han disparado sus costos, pues una situación similar ocurre en el tren de Guadalajara, el cual ya lo iban a inaugurar, programándose una partida de mil millones de pesos para 2019, pero según el reporte técnico se requerirán 3 mil 500 millones más.

Hay plantas a las que se les ha invertido y están convertidas en chatarra, pero así están gasoductos, hospitales, presas, universidades, trenes.

Estamos haciendo una reprogramación para ir terminando obras en proceso. Por ello, anunció que en el caso de los trenes, concluirán este año el de Guadalajara y en dos años el de Ciudad de México-Toluca.