jueves, 22 de octubre de 2015

Ciudad Perdida

Iztapalapa en la mira
El crimen rompe escudo
¿Y la secretaria de Gobierno?
Miguel Ángel Velázquez
O
currió en la delegación Iztapalapa, y aunque pudo haber sido en cualquier otra, fue allá, en el oriente de la ciudad, donde se han dado las condiciones para que los asesinatos, que por su factura hacen pensar en el crimen organizado, se cometan ante el horror y el miedo de los citadinos.
Sí, sin duda los criminales hallaron en Iztapalapa la puerta abierta para cometer sus fechorías, y antes de los cien días de gobierno empezaron a adueñarse de la tranquilidad no nada más de quienes viven en aquella parte del DF, sino de toda la capital, que puede constatar que esta forma de la delincuencia ha perforado los sistemas de seguridad impuestos en la ciudad de México.
Desde luego, la secretaria de Gobierno del gobierno central demostró ya su incapacidad para crear o para continuar con las formas de prevención que se habían dado en la delegación. Crear los argumentos para impedir el crecimiento de la violencia en la ciudad es una tarea de la Secretaría de Gobierno, que tiene en su manos Patricia Mercado, y que no ha encontrado, como se puede ver, el método certero para prevenir e impedirla.
Son dos fallas, si se ve de cerca. Por un lado, la secretaria de Gobierno, Patricia Mercado, y por el otro, la delegada Dione Anguiano, quien, como varias veces explicamos en este espacio, no podría evitar que el crimen organizado sentara sus reales, como dicen los clásicos, en aquella delegación.
Y es allí donde se han colado los delincuentes; es allí donde el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, debería explicar a la población que los programas de apoyo a la sociedad no son nada más una forma de dádiva, sino que tejen el entramado social que en buena cantidad de ocasiones impide que los jóvenes se unan a los ejércitos del crimen organizado, del que nunca salen.
Por eso, tratar de resolver el problema con soldados en la calles no es ni por asomo la solución; las muertes, las desapariciones, los desplazados son pruebas irrefutables del fracaso de ese tipo de política. Por el contrario, reforzar y ampliar los programas sociales han construido plataformas de paz que no ofrece la lucha frontal violenta.
Si el gran problema empezó ahora en los reclusorios, es tiempo de que la secretaria de Gobierno nos diga cómo se va a frenar tan grave asunto, y cómo va a trabajar en Iztapalapa para que la violencia no enferme a otras delegaciones donde el tejido social es muy endeble.
Por lo pronto, el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, debería hacer el recuento de los programas sociales que otorga su administración, y cómo con esos esfuerzos se han creado zonas de contención para que el crimen no inunde la ciudad, pero por lo pronto, Iztapalapa está en peligro. Hay que remediar el mal o como se llame.
De pasadita
Entonces, si es verdad lo dicho por el abogado de Marcelo Ebrard y el ex jefe de Gobierno no tiene ninguna cuenta pendiente con la justicia, y la línea 12 del Metro se echará a andar en unos días más, ¿se terminó la rabia o tendremos más de lo mismo más adelante?
Y además, lo que nos dijo el abogado sin requerir las palabras exactas es que Marcelo regresa al Distrito Federal. Parece que las aguas se tranquilizaron, aunque en el Metro, es decir, en todo el Sistema de Transporte Colectivo, desde hace rato nada mejora, todo empeora. ¡Que alguien nos diga cómo va el marcador!

No hay comentarios:

Publicar un comentario