Con los verdaderos empresarios no tengo ningun pleito, afirma López Obrador

De ganar, me reuniría con Peña para detener expropiaciones

Acompañado de los ex dirigentes panistas Germán Martínez y Manuel Espino, Andrés Manuel López Obrador se reunió con simpatizantes en el malecón del puerto de Progreso, YucatánFoto Cuartoscuro

Luis A. Boffil Gómez

Corresponsal

Periódico La Jornada
Sábado 5 de mayo de 2018, p. 5

Progreso, Yuc.

El candidato presidencial de la coalición Juntos Haremos Historia, Andrés Manuel López Obrador, manifestó que no tiene ninguna diferencia, ningún pleito con los que son verdaderamente empresarios de México, pero hay algunos que tienen intereses económicos y políticos y están provocando este enfrentamiento que yo les diría es artificial.

En una gira de trabajo que comenzó en Progreso y Valladolid, Yucatán, y culminó en Playa del Carmen, Quintana Roo, López Obrador continuó: Es parte de la propaganda en contra nuestra. Nosotros respetamos mucho a los empresarios de México, me he reunido con todos, con los comerciantes, con los de los municipios, de los estados del país.

El político tabasqueño agregó que hay un grupo que no quiere el cambio, entonces están muy nerviosos, desesperados porque la gente quiere un cambio verdadero, expuso ante una plaza llena en Progreso.

Insistió en que no tiene problemas con los que verdaderamente son empresarios, con los que no trafican con el poder, que no se han hecho inmensamente ricos al amparo del poder.

Acerca de si no fue un exceso responderle a ese grupo de empresarios, López Obrador dijo que no, es que de vez en cuando hay que hacerles ver, tienen que comprender que no son los dueños de México, que es el pueblo de México el único amo que existe en el país.

A la pregunta de si hay salida con este grupo, el candidato de la alianza que integran Morena, Partido del Trabajo y Encuentro Social expresó que siempre estará abierto al diálogo, es amor y paz. Sobre si se sentaría con los de la mafia del poder, a riesgo de perder la cartera, respondió que sí, con todos me reúno, no hay ningún problema, no tengo enemigos, tengo adversarios.

Recordó que el empresario Claudio X. González viene desde la época de Carlos Salinas, del que fue asesor económico; es de un grupo que se ha beneficiado mucho con la política de pillaje. También los comprendo, ellos quisieran que continuara este régimen podrido, corrupto, pero ya la gente no quiere que siga lo mismo.

En cuanto a lo dicho ayer por Mario Vargas Llosa, de que si López Obrador llega a la Presidencia no llegaría una catástrofe, pero sí un desastre, el candidato de Morena respondió que el peruano es un buen escritor, pero un mal político.

Ante unas 6 mil personas –según los organizadores–, el político tabasqueño encabezó al mediodía un mitin en el parque de La Paz, a la orilla del mar, y sostuvo que al día siguiente de las elecciones, cuando se dé a conocer que resultó ganador, se reunirá con Enrique Peña Nieto para detener la expropiación de los recursos naturales. ¡No se venderán ni el petróleo ni el agua!, aseguró.

El candidato se comprometió a no entregar la costa, el litoral de Yucatán y Quintana Roo. Añadió que se cancelarán las licitaciones para la expropiación petrolera en esa dos entidades.

Imagínense, hasta a qué grado ha llegado la ambición, cómo van a destruir este paraíso con la expropiación petrolera, si lo que ha crecido en la península ha sido el turismo, sin apoyo del gobierno, señaló.

Por la tarde, López Obrador estuvo en Valladolid, donde recordó que hace 60 años que no hay un presidente de México originario del sureste del país. Es una de las zonas más abandonadas y pobres a pesar de sus riquezas naturales, pero ya va a llegar la hora del sureste, auguró.