Néstor Jiménez y Roberto Garduño
Periódico La Jornada
Viernes 31 de agosto de 2018, p. 10
Viernes 31 de agosto de 2018, p. 10
La semana próxima, cuando se reúna la Junta de Coordinación Política (Jucopu) de la Cámara de Diputados, se definirá el mecanismo de reducción de las percepciones que reciben los legisladores y cuyo monto –en suma– se acerca a los 145 mil pesos mensuales.
El coordinador del grupo parlamentario de Morena, Mario Delgado, refirió que en San Lázaro nadie ganará más que el presidente de la República.
A la fecha, la dieta (el salario) de los diputados es de 74 mil pesos al mes, pero al volumen de esas percepciones se suman tres rubros de apoyo legislativo: se les paga renta del local para sus oficinas de atención ciudadana; los salarios de sus ayudantes en esos sitios y el trabajo legislativo. Todo ello se acerca a los 150 mil pesos al mes.
Lo probable, dentro de las medidas de austeridad que prevén en la Cámara de Diputados, es que la dieta no se toque y la dirección en el grueso de las percepciones de los legisladores se aplique en los apoyos para la tarea legislativa.
Se pretende que en suma ningún diputado pueda obtener más de 100 mil pesos de ingreso.
Comité de Administración, fundamental
El líder de la bancada de Morena adujo que las medidas de austeridad se tomarán en el Comité de Administración –instancia legislativa que se integra con diputados de las distintas fracciones parlamentarias y personal de la Cámara–, donde habrán de revisarse los recursos que se manejan en San Lázaro.
Tenemos que ver los números para ver el impacto total. Lo que sí sabemos ahora, es que queremos cancelar ya, de inmediato, el seguro de gastos médicos, el de retiro, temas de vales de comida, telefonía, las consultorías externas que se contrataban a los despachos: también a eso le vamos a meter tijera.
El representante morenista, desestimó las quejas del sector de seguros privados, que ahora advierte que perderán clientes, cuando ha resultado beneficiario de los contratos multimillonarios que ha establecido con las instancias de gobierno.
Digamos, van a perder un cliente importante aquí en la Cámara de Diputados, pero son empresas privadas que se dedican a esto; hay años que les va bien, hay años que no y seguramente ellos tratarán de sustituir con otros clientes.
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