Beatriz Gutiérrez Müller seguirá en su profesión: investigar libros y literatura

Elio Henríquez

Corresponsal

Periódico La Jornada
Sábado 25 de agosto de 2018, p. 4

San Cristóbal De Las Casas, Chis., Para los que se preguntan qué hará Beatriz, esta es una de las cosas que voy a seguir haciendo; esta es mi profesión: la de investigar libros y literatura, afirmó Beatriz Gutiérrez Müller, esposa del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, al participar en la presentación libro Poesías 1889-1898, facsímil de manuscrito de Rodulfo Figueroa, con edición y notas suyas.

Ante cientos de personas que acudieron al acto realizado la tarde noche de ayer en la explanada del Museo de San Cristóbal de las Casas, dijo que como sociedad nos hace bien la paz y creo que las palabras y la poesía en particular son un vehículo para la paz.

Expresó que debido al centralismo de los siglos XIX y XX, el poeta chiapaneco Rodulfo Figueroa (1866-1899), iniciador de la poesía moderna, fue más reconocido en Guatemala que en México. Es una pena, pero también tiene una razón de ser porque estudió medicina allá y como muchos saben, es innegable el vínculo que ha tenido Chiapas con Guatemala.

Señaló que venir aquí es un resarcimiento de un gran poeta que fue olvidado por el centro. Traer a Rodulfo a San Cristóbal y mañana a Cintalapa, donde nació, es hacer justicia a un escritor que hace más de 120 años dejó este manuscrito que por azar cayó en mis manos y hoy está para ustedes.

Afirmó que Rodulfo tampoco trascendió mucho a escala nacional por su prematura muerte; adicional a ese asunto que es circunstancia de la vida, existía otro, que en el siglo XIX, y parece que no termina de irse esa idea de que en el centro ocurre todo.

Vengo a San Cristóbal de las Casas porque no todo ocurre en Ciudad de México. En el XIX era igual y en el XX era igual y no me gustaría que en el siglo XXI sigamos padeciendo un centralismo cultural, artístico literario, donde si no somos significados desde allá, no tenemos ningún valor para el resto. Ese es un problema real. Todo ocurría en el centro en aquel lejano siglo XIX y entonces el poeta que no lograba figurar en los periódicos de allá no era conocido, manifestó.